OPINIÓN

La pasta

07/02/2003

Joaquín Abad | Martes 10 de junio de 2014
Parece que todos van a lo mismo. En USA, en Argentina, en Venezuela… La máxima de los ricos es trincar más aún.

Cuando creíamos que sólo en los países sudamericanos se forraban de tanto robar y robar, los de siempre, los banqueros, empresarios, políticos, van los de la moral intachable y descubren el lío de Endemol. Y empiezan a salir de los grandes rascacielos los ladrones de guante blanco, y todos como si tal cosa…
Aquí, en nuestra tierra, metiendo al banquero Mario Conde en la cárcel parece que se acababan escándalos. A uno por década, claro, porque en el ochenta cayó Ruiz Mateos y su imperio de la abeja. En la década del noventa le tocó a Conde, -aparte de Roldán, Vera, Mariano Rubio- y en ésta, en la del dos mil del nuevo siglo parece que van detrás de Emilio Botín, que acaba de suspender la junta general de accionistas para no responder por otro asunto que aún no está en los tribunales: Se trata de que a Emilio Botín le resultó más barato comprar a los consejeros del BCH en lugar de pagar a los accionistas. Y claro, los consejeros se vendieron muy caro. A José María Amusátegui lo despachó con los 43 millones de euros que ahora se discute en la Audiencia Nacional ante la juez Teresa Palacios. A Ángel Corcósteguii la indemnización, o la compra, le sale por 106 milloncejos de euros. Casi nada…
Y es que los españoles ya estamos acostumbrados a que de las Opas se beneficien sólo los bancos propietarios de dicha opa, a que existan dos clases de indemnizados: los asalariados y los banqueros… Incluso en la Iglesia se está dando semejante ejemplo. Por lo menos la Iglesia andaluza. O si no que se lo pregunten al cura Miguel Castillejo, amo de Caja Sur, de cuya forma de vivir la cristiana vida ya nos hemos enterado. De sus viajes millonarios, de sus pólizas para él y sus hermanas, de sus caprichos. Y de que a ese cura y su Cajasur no la controla ni el obispo de Córdoba. El presidente Chaves ha declarado ilegal los ajustaditos 2,9 millones de euros de póliza de jubilación, mientras mira para otro lado respecto al otro presidente de caja, Unicaja, Braulio Medel, de casi el doble. A don Braulio hay que pagarle los servicios prestados a la Junta, algunos inconfesables. ¿Verdad?