Pues sí, el euro parlamentario ha echado en cara a los políticos presentes que el sistema pone impuestos a los ciudadanos para malgastarlos. Ha tenido la valentía de decir que no tienen fuerza moral para hablar de evasión fiscal cuando ellos no pagan impuestos como los demás ciudadanos y gozan de privilegios y ventajas fiscales de las que los ciudadanos, los que pagan los impuestos, carecen. 

Y es que va siendo hora de que alguien reclame una regeneración total de la política. Porque en estos años, por lo menos en España, cada vez la podredumbre es mayor, y no por eso los partidos de clase, pepé y pesoe, parece darse por aludidos y miran para otra parte. Y los que parecen suceder, con menos años, a los quemados, a los que nos han llevado a esta situación, pues resulta que proceden, como Pedro Sánchez, de la casta que, por ejemplo, formaba parte, era Consejero, de la Asamblea de Cajamadrid en tiempos de Miguel Blesa. Ya saben, las preferentes donde han estafado a miles de ahorradores. El amigo de Aznar y sus cómplices. Porque los consejeros de Cajamadrid avalaban los atracos y miraban para otra parte. Ellos cobraban sus dietas, y vete a saber cómo Blesa agradecía a sus condicionales. 

Me da en la nariz que cada vez más vamos a encontrarnos con políticos honrados, como el británico Murray Rothbard, que van a decir alto y claro, en parlamentos, cómo los políticos viven como dios a cuenta de los impuestos de los ciudadanos. Y como los políticos están exentos de impuestos, y tienen pensiones en paraísos fiscales...

Esto va a cambiar. O por lo menos, esto debe cambiar.