En “El virus andorrano” Joaquín Abad cuenta la historia de unos científicos nazis que se refugian en ese paraíso fiscal para seguir creando ciertos virus. Quien conozca Andorra no podrá dejar de sorprenderse de las ubicaciones que describe el autor almeriense. También es una novela de espías donde conoceremos los entresijos de la Entidad, los servicios secretos del Vaticano, siempre dispuestos a luchar contra el mal y sus aliados los magnates del la banca y las industrias farmacéuticas. También son luchadores infatigables contra la globalización. En la entrevista, Abad nos da algunas de las claves de su nueva novela, aunque no todas. Para conocerlas tendrán que leer la novela.

“El virus andorrano” es su cuarta novela sobre el Principado. ¿A qué se debe su interés sobre ese pequeño paraíso fiscal?

Quizá sea porque fue la primera historia que escribí con lo que algunos andorranos me contaban durante los años que iba a ese lugar de vacaciones. La verdad es que eran relatos increíbles por su crudeza, pero que luego resultó que eran muy ciertos.

¿Qué se siente al ser el autor más leído de Andorra?

Pues que me obliga a seguir escribiendo y con la obligación de no decepcionar. Pero Andorra es una auténtica mina de historias, misterio y relatos increíbles. Es fácil contar historias de ese territorio porque son inagotables.

No sé si es mi impresión, pero me parece que esta novela es la que tiene más ficción de las suyas. ¿Es así?

En las anteriores novelas mezclaba ficción con personajes y hechos reales. En este caso sigo la misma trayectoria que gustó al lector. Ocurre que la historia se inicia con Pablo VI y termina en un futuro año 2029. Por supuesto tiene que haber mucha ficción, aunque dejo varias historias reales que sólo los andorranos sabrán distinguir.

La novela comienza al final de la Segunda Guerra Mundial. La operación Paperclip salvó a muchos científicos nazis de la ejecución. Lo que cuenta en su novela tiene visos de verosimilitud, pero ¿todo es ficción o hay partes reales?

La parte de los científicos que se instalan en Andorra es ficción. Pero la realidad es que durante la Segunda Guerra Mundial Andorra fue asiduamente visitada por conocidos nazis. Algunos se quedaron. Y algo de dinero y oro pasó por la frontera del Principado para ingresarlo en cuentas secretas bancarias.

¿Le costó mucho documentarse para escribir esta peliaguda trama?

La verdad es que con la imaginación se pueden hacer maravillas. Y mezclando ficción y realidad sale un coctel bastante explosivo.

Es una novela de buenos y malos. Los buenos son los agentes del Vaticano y los malos los integrantes del Club Bilderberg y la Nobleza Negra Veneciana. Hay poco escrito sobre La Entidad. ¿Cómo dio con estos servicios secretos?

Sobre el servicio secreto vaticano hay poco escrito, quizá el único autor que se ha atrevido a indagar en esas historias, las reales, ha sido Eric Frattini, que tiene varios libros de obligada lectura para todo el que quiera conocer algo sobre la Santa Alianza, precursora de La Entidad, quizá el servicio secreto mejor informado del mundo dado que disponía de sacerdotes en todos los rincones del mundo que pasaban información puntual de lo que acontecía, iba a suceder y sobre todo, de las confesiones.

Al Club Bilderberg pertenecen los más reconocidos banqueros y especuladores. ¿Son los principales promotores del Nuevo Orden Mundial?

Por supuesto, son los que fundaron la ONU y ahora están tras la nueva agenda 2030, donde se trata de frenar el crecimiento la población mundial y la existencia de un organismo extranacional, integrado por técnicos y financieros, que gobiernen el mundo.

¿Cuáles serían los principios de ese Nuevo Orden Mundial?

Sobre todo terminar con el capitalismo tal como lo hemos conocido. Controlar el crecimiento de la población, eliminar las fronteras y tener una nueva clase media más obediente que consuma lo que fabriquen… Lo veremos porque después de la pandemia nada volverá a ser como antes.

¿Debemos temer sus objetivos? ¿En qué forma cambiarán el mundo actual?

Ya lo están cambiando. Vivimos medio confinados con la esperanza de que ello nos permita no morir, y aún así el virus se está cobrando miles y miles de vidas a diario. El objetivo es que exista un gobierno por encima de las autonomías de los países. Llevan muchos años organizándolo, desde que Rockefeller inició su cruzada.

George Soros es el sucesor de Rockefeller

¿Qué papel juega el especulador George Soros en esta nueva realidad?

Creo que Soros es el magnate, representante de todos los que forman el club Bilderberg, y es quien da la cara. Quien a pecho descubierto ha movido con sus revoluciones de colores a gobernantes incómodos a sus teorías de sociedades abiertas. Creo que es el sucesor de Rockefeller.

¿Es peligroso sacar los trapos sucios Soros?

No son trapos sucios. Son simplemente sus políticas, su idea del mundo. De cómo quieren los magnates que sean los gobernantes, los políticos. De cómo han planificado una serie de teorías que poco a poco las van implementando a base de crear toda una tela araña de sociedades, fundaciones y organizaciones para poner en marcha toda una ingeniería social.

A parte de los banqueros, ¿las empresas farmacéuticas tienen muchos intereses en ese nuevo orden?

Todo está entrelazado. Los magnates son los dueños de las farmacéuticas y son las que siempre ganan cuando los demás enferman. Es lógico que las pandemias sean un gran negocio para los que van a fabricar, todos los años, miles de millones de vacunas.

En la novela aparecen diversos virus que han asolado el mundo los últimos sesenta años. ¿Cuál ha sido el más peligroso?

Si duda estamos sufriendo el más peligroso, que muta cada mes y veremos si las vacunas, que tanta esperanza dan, serán efectivas ante tanta mutación.

¿No es extraño que no se haya conseguido una cura o vacuna del SIDA en treinta años y en unos pocos meses sí se tenga la de la COVID-19?

Eso mismo se preguntan muchos en el sector sanitario, a lo mejor es que el negocio está en mantener enfermos y no sanarlos.

Novela de espías, aventuras, thriller… ¿A qué género la circunscribiría usted?

Sobre todo de espías, porque sin ese ingrediente no sería posible el argumento de la novela. Además, sus protagonistas son espías de Dios.

¿Nos tiene preparadas más sorpresas sobre Andorra?

Por supuesto, ya estoy preparando otra novela, esta no de espías, sino de la historia del contrabando que enriqueció a un pedazo de tierra olvidado en el interior del Pirineo.